Aquí les traigo una noticia que está circulando hace poco tiempo: "La eliminación de subsidios a los grandes del sector agrícola estadounidense", lo cual se enmarca dentro de los paquetes que la administración Obama viene aprobando con la intención de reordenar el presupuesto de su país.
El flamante presidente de EEUU Barack Obama viene aplicando una batería de medidas para tratar de sacar a su país de la crisis.
Dentro de las de mayor repercusión global y de mayor importancia para nuestra economía, destaca, sin lugar a dudas, los recientes anuncios sobre una posible eliminación de los subsidios estatales a la producción agrícola estadounidense.
En principio, todo parece indicar que la medida estaría dirigida a los grandes agronegocios. No obstante, no deja de ser una excelente noticia de cara a comenzar a sincerar la acción de la superpotencia en un mercado que no es en extremo sensible.
La mencionada eliminación de subsidios a los grandes del sector agrícola estadounidense se enmarca dentro de los paquetes que la administración Obama viene aprobando con la intención de reordenar el presupuesto de su país, que a esta altura, y salvatajes y nacionalizaciones mediante, es un verdadero monumento al déficit.
Mientras se van conociendo los detalles de aplicación del nuevo mega paquete de estímulo de 800 mil millones de dólares con el que se pretende inyectar confianza y reactivar la demanda de la mayor economía del mundo, el novel presidente señaló que se acerca el final de los subsidios directos a grandes negocios agrícolas, prebenda que además de distorsionar el mercado mundial, y de perjudicarnos directamente, estas empresas no necesitan para ser rentables.
Todavía no se conocen demasiados detalles de la medida, lo cierto es que significará un ahorro importante para los contribuyentes estadounidenses.
Como muestra del volumen de las transferencias al sector agrícola por parte del Estado que se ufana de su liberalismo, aparecen subsidios para cultivos y producción láctea por un monto cercano a los 7.500 millones de dólares, cuyas 2/3 partes se realizaban mediante pagos directos a los productores.
Habrá que ver qué parte de los anuncios logra concretarse en los hechos, no obstante, con que tan sólo una porción de ello se cumpla repercutirá en todos los productores del mundo.
Incluidos los nuestros que deben competir no sólo contra las inclemencias climáticas, los vaivenes naturales de estos mercados en tiempos de crisis y retracción de la demanda, sino con este tipo de vivezas que, lejos de ser criollas, han sido parte de los desequilibrios a que nos hemos debido acostumbrar en un mundo que aún dista mucho de estar regido por el comercio justo y donde el más grande impone sus prerrogativas al resto.
Al menos en esto parece que la crisis se encargará de reparar algunas injusticias.
Las otras, dependen de nosotros.
Saludos y hasta la próxima.
CPN. MONJO FERNANDO
Asesor Financiero
Proyecto litoral.
Fuente: La República, Uruguay
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